Ghassan Saliba: "Evitar la guerra en Oriente Medio, exigir el diálogo y la no injerencia extranjera en la zona."


La guerra fría ha vuelto en su expresión más violenta a  Oriente Medio y al mundo árabe en general. Amenaza a la zona con  una guerra o  ‘guerras’ regionales, que pueden involucrar directamente a potencias regionales e internacionales. Cada potencia mundial tiene su agenda estratégica en  Oriente Medio. En su conjunto reflejan intereses antagónicos. Intereses por parte de norteamericanos y occidentales  en dominar las fuentes energéticas y  dotar de una  mayor protección al estado de Israel. Intereses de Rusia en recuperar un papel dominante como potencia mundial, en alianza con China y algunos países de América Latina, India y Sudáfrica, y en tener una salida al mar Mediterráneo. Este es sin duda un momento histórico con un nuevo orden internacional, en el que conviven los restos de un orden monolítico con una nueva geometría multipolar en fase germinal. Rusia, ignorada durante décadas, en las guerras del golfo, en la ocupación de Irak, últimamente en Libia, vuelve a recuperar su influencia en el conflicto alrededor del programa nuclear iraní, y a través del conflicto sirio.  Oriente Medio y los pueblos de la zona son, de nuevo, presa de intereses e injerencias extranjeras. Cada potencia con sus jugadores en la región, y sus actores dentro de cada uno de los estados. >>>